Uno de los motivos más fuertes y comunes para no ir a la playa o usar el traje de baño que más disimule el problema. Las estrías son estéticamente muy feas, pues son líneas blancas que salen en diversas partes del cuerpo que a veces son difíciles de ocultar y pueden llamar la atención de la forma que no queremos.
La causa de su aparición no es solo una. Por ejemplo está la etapa posterior al embarazo cuando notamos que la piel se ha estirado y luego se contrae en la parte del abdomen. También pueden darse por la formación anormal de colágeno, o una interferencia en la formación del mismo. Enfermedades como la diabetes también pueden producir estrías.
Métodos para deshacerse de las molestas y antiestéticas estrías hay de varios tipos. Por ejemplo uno de ellos es la cirugía con láser, un tratamiento rápido que mediante un haz de luz concentrado estimula las células de la dermis para producir tejido nuevo. Generalmente los lugares en los que son más evidentes las líneas son los muslos, el vientre, los brazos y la espalda baja.
La alimentación es fundamental, pues llevando una dieta rica en frutas y verduras obtenemos vitaminas y minerales fundamentales para la salud de la piel. Estas son vitamina C, vitamina E, zinc y sílice. Aparte de consumir la vitamina E como un suplemento, puedes usar aceite de la misma vitamina para masajear tu piel varias veces a la semana.
Algo muy importante es la actividad física. Realiza flexiones, ejercicios, tonificación y evita el sedentarismo que tanto daño causa. Puedes bailar, caminar, trotar o proponerte alguna actividad semanal que te mantenga en forma. Por último, toma mucha agua, entre 8 y 10 vasos diarios, pues esto elimina las toxinas, nos limpia y nos mantiene hidratados.