Te ha pasado alguna vez que cuando vas a usar alguna prenda negra notas que se está tornando un poco morada o gris? en un tiempo fue negro intenso pero al combinar dos prendas del mismo tono se ven de dos colores muy diferentes? O también es fácil que ocurra con el blanco, que con el tiempo va tomando tonos amarillosos y hace que la prenda se vea vieja y desgastada. Pues bien, es momento de que tomes en cuenta algunos tips que vamos a sugerirte, para que mantengas no solo tu ropa sino la de tu familia en perfecto estado.
Es sabido aunque no muy aplicado, que las prendas deben lavarse de acuerdo a ciertas especificaciones. Es decir, las de color, las blancas y las delicadas por aparte, pero muchas veces por tiempo o más bien pereza preferimos ponerlas todas juntas en la misma carga y no nos fijamos en como salen después, o como de hacerlo tantas veces la ropa va perdiendo su color y forma originales. Así que a lavarlas por separado.
Para los trajes de los hombres o los conjuntos de sastre de mujeres, la forma como se cuelgan es importante. Deben estar en un closet en un gancho o soporte de hombros anchos que soporte perfectamente el peso. El pantalón debe colgarse en los separadores del gancho especiales para eso, pero de lo contrario, colgarlo de la cintura para evitar las arrugas del doblez en la mitad. Es necesario que esté colgado con libertad hasta abajo y no que por el contrario gane más arrugas que luego son difíciles de quitar. Si hay una corbata, existen ganchos más pequeños especiales para eso. Lo importante es no guardarlas todavía con el nudo si no mantenerlas lisas porque con el nudo se arrugan mucho.
Las camisas están en mayor contacto con el cuerpo y la sudoración, por lo que deben ir a lavarse con más frecuencia, si es posible a mano. Si no se cuenta con el tiempo, en la lavadora pueden ir en una de esas bolsas de malla, con centrifugado suave, un jabón de muy buena calidad y suavizante. Para plancharlas es mejor humedecer un poco la camisa para que el resultado sea mejor. No las pongas a secar al sol directo porque pueden “marearse” o perder el color, más bien ponlas al revés antes de meterlas a lavar.
Con los zapatos es otra historia, si los usas un día, es mejor que reposen otro, es decir, que se aireen un poco y las fibras se re acomoden y “descansen” pues han recibido todo el día humedad y olores. Si tienes zapatos que deben ser lustrados cada cierto tiempo, es mejor que uses cremas para que penetren mejor en el cuero. Para guardarlos es mejor que sea en un lugar amplio para evitar malos olores en todo el closet.
La ropa en general es aconsejable que la guardes de acuerdo a su tipo. Es decir que las chaquetas todas vayan a un solo lado, los pantalones igual y las camisetas o camisillas dobladas aparte pues una prenda pesada al lado de una frágil puede dañarla, generarle arrugas y reducirle su tiempo de uso.
Recuerda no usar una prenda muchas veces pues la humedad y los olores pueden impregnarse demasiado creando manchas que luego serán más difíciles de quitar.
Cuida lo que te pones porque eso garantiza que los demás te verán bien, y de hecho también te sentirás más cómodo(a) en una ropa limpia, cuidada y en perfecto estado.