Sabemos de sobre manera el valor que tienen nuestros ojos, sin embargo muchas veces los descuidamos con pequeñas acciones que ni nos damos cuenta cuando las hacemos. Solo nos imaginamos lo difícil que puede ser el mundo de los invidentes y lo fuertes que deben ser, al enfrentarse al mundo sin poder apreciar lo que los videntes tienen el privilegio de experimentar a cada segundo.
Cuando descuidos pequeños o grandes errores nos ocurren, pasa que aparecen ciertas infecciones en nuestros preciados ojos que además de ser dolorosas, pueden complicarse si no se tiene el cuidado apropiado. El orzuelo es una inflamación que se produce en la glándula sebácea que está en el borde del párpado. Aparece como un bulto que puede darse tanto en la parte superior como en la inferior y es muy doloroso e incómodo. Es imprescindible entender la higiene que debemos adoptar con nuestras manos pues siempre nos tocamos la cara y los ojos sin pensar la cantidad de bacterias que puede haber ellas. El maquillaje en el caso de las mujeres es importante revisar y mantener en un contenedor limpio, que no toque otros objetos como dinero o cosas que estén en contacto con el exterior.
En la noche antes de dormir si no tienes mucho tiempo, intenta aplicar compresas de agua caliente sobre el orzuelo. Si puedes, repite dos a tres veces a día para tener un resultado más rápido.
Un remedio casero que parece traído por las abuelas, quienes aseguran que funciona, es usar una cuchara o un objeto metálico muy limpio eso si, frotarlo contra una tela o toalla también limpia, y ponerlo así caliente sobre la protuberancia.
Y bueno, el típico remedio que no falla, ponerte unas bolsitas de te sobre los ojos. Necesitarás humedecerlos y entonces déjalos actuar por 10 minutos aproximadamente.
Evita a toda costa compartir toallas o pañuelos con quien vives o personas cercanas pues son muy contagiosos y no sabes en qué momento podrás adquirir uno. Lava constantemente tus manos y mantén en tu cartera o morral un frasco pequeño de desinfectante o antibacterial.