Basta de la melancolía, ser feliz es una elección, lo creamos o no. Obviamente, algunas contingencias (crisis, enfermedad, accidente,..) se imponen ante nosotros. A pesar de todo, está sólo en nuestras manos cambiar para acceder a la felicidad. Podemos modificar aspectos concretos de nuestra existencia (materiales, profesionales, relacionales), pero también nuestro estado mental.
Debemos tener en cuenta que somos los “artífices de nuestra propia felicidad”. Despeguémonos del cliché de bella casa-buen trabajo-buen marido-labrador, pues no existe norma para ser feliz. La felicidad es eso que cada uno piensa, para él mismo. No olvidemos que nuestra concepción de felicidad evoluciona con el tiempo, no es la misa a los 20 o a los 40 años.
Te presentamos cinco consejos estimulantes para construir lo que quieres vivir e ir de frente a la vida, buscando tu propia felicidad.
1. Presionar el botón “pausa”
Para reorientar la vida, descansar es indispensable. Esto parece complicada en un época donde el tiempo parece contado, sin embargo es esencial. Debemos tomar una pausa y reflexionar sobre lo que nos inquieta.
2. Hacer selecciones
Deshazte de todo lo que te retiene, todo lo que es pesado y no obligatorio. Adiós a los deberes y obligaciones que nos imponemos, y que toman toda nuestra energía. Sepárate de los objetos que estorban.
3. Encontrar un equilibrio entre los deseos y la realidad
Tener la ambición de mejorar su condición, primero. Pero bajo la condición que no sea bajo “cualquier precio”. Si, es necesario tratar de ir lo más lejos posible dentro de nuestros ideales de cambio. Pero debemos aceptar que algunas cosas son inflexibles. Un día, por ejemplo, dura sólo 24 horas, y no tenemos veinte brazos y tres cerebros. Es importante elegir, para poder encontrar el ritmo que nos conviene.
Igualmente, hay que evitar nutrir algunas frustraciones, como “si tuviera dinero, podría hacer esto o lo otro”. No solamente nada nos garantiza que seremos más felices, pero eso conlleva a un sentimiento de mediocridad personal.
4. Luchar por lo que realmente nos importa
No es suficiente tronar los dedos para acceder a una vida mejor. Es necesario enderezarse y sobretodo, atreverse. Atrévete a vivir la vida que deseas vivir, atrévete a cambiar los hábitos. En fin, atrévete a tomar decisiones que te vuelvan libre, y asúmelas.
Eso también quiere decir atreverse a decir NO, aunque no parezca fácil. Da miedo, pero cuando aprendemos a decir no con cierta sutileza, nos damos cuenta que nada grave puede suceder. Además las personas saben diferenciar entre un verdadero SI y un si que quiere decir No. Debemos determinar lo que es indispensable, o al contrario lo que es anulable.
5. Vivir plenamente
La felicidad es también un cambio mental. Que seamos ricos o pobres, que tengamos una vida complicada o no, podemos gozar de toda clase de pequeños momentos de gracia: admirar la belleza de una flor, escuchar la risa de un niño…
Ofrécete instantes de felicidad. Y sobre todo, no olvides que no tenemos sino una sola vida. Entonces, qué esperas para ser feliz?