Por años hemos escuchado opiniones contradictorias sobre los efectos del picante para la salud, unos dicen que bueno, otros que malo, cada lado con sus defensores llenos de convicción. Bueno, es hora de dejar de lado el mito y mirar las evidencias que hay en la actualidad para defender o refutar estas posturas.
Para muchos, el picante es malo para el estómago, muchos aseguran incluso que puede empeorar condiciones gástricas como las úlceras. Esta afirmación como tal no es cierta, el picante no tiene un efecto negativo en las úlceras, de hecho, varios estudios demuestran que el picante tiene efectos positivos para el estómago y la digestión en general.
Sin embargo, esto no quiere decir que el picante no pueda tener complicaciones en casos específicos. Lo cierto es que, como sucede con casi todos los alimentos, el exceso representa peligro potencial. Un estudio realizado en México demuestra que comer picante en exceso (de 9 a 20 jalapeños por día) puede llegar a causar cáncer de estómago. Esto suena realmente terrible, pero no es diferente a las consecuencias del exceso de grasa o azúcar, y las consecuencias que estos pueden traer a la salud en términos de diabetes o afecciones cardiacas.
Ahora, ¿por qué nos gusta el picante?, el picante contiene una sustancia llamada Capsaicina, que quema las terminaciones nerviosas (de manera muy leve, por supuesto), esto impulsa al cerebro a reaccionar con analgésicos naturales, es decir, endorfinas; las cuales no solo reducen el dolor, sino que producen también placer, y nos hacen buscar más picante. Esta substancia tiene además efectos benéficos para la salud, y en conjunto con los diferentes nutrientes en el picante, como el calcio y las vitaminas A y C entre otros; ayuda a mejorar el metabolismo, es bueno para la circulación, la digestión y la pérdida de peso.
El picante tiene grandes beneficios, y puede darle a las comidas un extra para hacerlas divertidas, así que es hora de darle la oportunidad!