Pueden ser muy pocas las mujeres que no han padecido de esa molesta condición, a la que llamamos celulitis. Y es que incluso las super modelos, cuyo cuerpo creemos es perfecto, de alguna manera han sufrido los estragos de la conocida piel de naranja.
No se trata de algo grave, es un problema estético que de todas maneras afecta un poco nuestra autoestima y nos avergüenza un poco, sobre todo cuando vamos a la playa o debemos mostrar las piernas un poco más. También se presenta en los glúteos, vientre y brazos, y se caracteriza por mostrar una piel con ligeros hundimientos y algo blanda. Pero no hay porque preocuparse pues tiene solución, o al menos puedes controlarla, eso sí, conociendo qué tipo de celulitis tienes y reconociendo como se presenta tu piel.
Existen tres tipos de celulitis, así que empecemos de una vez hablando del primero. Se trata de la celulitis adiposa, que refiere un exceso de grasa y tejido adiposo o grasoso debajo de la capa más profunda de la piel. Como sucede esto? pues es posible que no estés teniendo los mejores hábitos alimenticios y encima de todo, no estés haciendo mucha actividad física. Si la ves en tus muslos, la zona interna de las piernas hacia las rodillas, los glúteos y las caderas es posible que la tengas. Este tipo de celulitis muestra tu piel blanda, con irregularidades, a veces protuberancias si aprietas una sección. No es firme y se siente espesa.
La celulitis acuosa como ya lo infiere su nombre, es causada por la retención de líquidos. También la podemos encontrar en los glúteos, las caderas, muslos y brazos. La puedes identificar porque tendrás una sensación de pesadez, o que tus piernas se sienten hinchadas y te duelen. El problema es de tipo circulatorio y aunque la piel de hecho no te duele, si se puede ver como de naranja y flexible cuando la tocas.
La celulitis fibrosa se produce por moléculas de glucosa que se fijan a las fibras de colágeno, produciendo una rigidez de la piel, haciendo que la celulitis sea más severa. La encuentras en los brazos y al interior de los muslos, y puedes reconocerla porque la piel tiene un aspecto irregular, está en extremo flácida y es posible que te duela al pincharla.
Para cualquier tipo de celulitis es recomendable mantener una dieta saludable, es decir, que comas muchas frutas y verduras, cero azúcar, evites los embutidos y los alimentos cocinados con aceite o que resulten demasiado grasosos. No dejes de ejercitarte, al menos empieza por caminar media hora diaria y sigue con algún deporte que te guste. Puedes hacer paseos en bicicleta o algo que ejercite tus piernas, que es donde se acumula más la celulitis. Es importante que visites al médico para que diagnostique mejor tu condición, y basado en ello puede recomendarte una adecuada rutina de ejercicios.