Para nadie es un secreto que la pasta es uno de los alimentos preferidos por mucha gente alrededor del mundo. Es un ingrediente fundamental en cantidades de platos y por si fuera poco, nos encanta porque es muy fácil y rápido de preparar.
Generalmente, conocemos de memoria el espagueti, talvez los raviolis y los macarrones, pero tendemos a desconocer que otro tipo de pastas hay, como se diferencian y como podemos aprovechar sus beneficios y exquisito sabor.
El Fusilli, es una pasta corta que tiene la forma de tornillo, o bien puede reconocerse como pequeños tubitos entorchados parecidos a una espiral. Se usan comúnmente en preparaciones con vegetales y salsas fuertes.
Dentro de las pastas largas tenemos varias opciones. Una de ellas es el Linguini, que es como un espagueti, del mismo grosor pero plano y angosto, utilizando casi siempre en preparaciones similares a las del espagueti. Luego está el Fettuccine, que también es una pasta larga, plana pero un poco más ancha que el Linguini. Se la asocia con el famoso plato Fettuccine Alfredo que esa base de mantequilla y queso, y también con pollo y a veces mariscos. Tenemos también los Tallarines que viene siendo igualmente una pasta larga, plana y más ancha que las anteriores. suele prepararse con salsas fuertes y espesas como bien puede ser la bolognesa.
Una deliciosa opción, es el tortelini, que es una pasta rellena parecida a un croissant, y generalmente lleva adentro queso, pero se encuentran otras variedades como carne de res. Los raviolis son parecidos porque son también pasta rellena, esta vez con forma cuadrada y de bordes dentados, que pueden traer dentro panceta, carne de res, ternera, pollo y diferentes tipos de queso.