Mucho se ha comentado últimamente acerca de los autos eléctricos, pero poco se sabe realmente de todo lo que ha sucedido al interior de la industria automovilística para llegar a lo que hoy en día se ha vuelto tendencia.
Los primeros vehículos comerciales impulsados por energía eléctrica salieron al mercado en 1896, Hartford Electric Light Company ofrecía a sus clientes la venta de las baterías para el automóvil a la venta en manos de la General Vehicles Company GVC, una subsidiaria de General Electric Company, además de ofrecer varios sitios donde se prestaba servicio de mantenimiento.
Durante la segundo guerra mundial fueron las naciones europeas las que exploraron métodos de transporte alternativo, pero los intentos fueron prontamente descartados debido al alto costo de los mismos. No fue sino hasta 1966 cuando el gobierno estadounidense, preocupado por la calidad del aire en áreas metropolitanas, paso una iniciativa para el desarrollo de automóviles eléctricos. Gultum Industries comenzó el desarrollo de una nueva batería de litio, que prometía disminuir el coste de producción y crear un producto que fuera competitivo en el mercado.
No fue sino hasta principio de los 90s que el boom de los vehículos alternativos llego, dado el alarmante incremento de la contaminación en las ciudades. En su documental “Who killed the Electric Car”, Chris Paine revela el boicot que se llevó a cabo por parte de las compañías petroleras para limitar la producción de automóviles que no necesitan gasolina; en este documental se describen también los obstáculos políticos que se presentaron. Actualmente se han reunido los factores necesarios para innovar en el campo, con la creciente preocupación por el equilibrio ecológico, la disminución de los recursos petroleros y el incremento del precio de la gasolina; la alternativa que presentan los autos eléctricos es cada vez más atractiva para los consumidores. Es en este tipo de situaciones en que podemos ver la fuerza que pueden tener las tendencias, como lo es la actual ola verde, junto con el miedo a las consecuencias ecológicas.
Hoy en día en las calles de Hong Kong, una de las ciudades más contaminadas del mundo, hay una flota de taxis funcionando con energía eléctrica. En América ya son varios los modelos disponibles para los compradores con conciencia ambiental. Adicionalmente, Ingenieros y científicos en todo el mundo buscan crear baterías que sean cada vez más limpias, efectivas y durables.